Los antisépticos son sustancias que se aplican sobre tejidos con vida, con el objeto de matar o impedir el desarrollo de los microorganismos. Otra diferencia entre antisépticos y desinfectantes es que los primeros son menos potentes.
Los desinfectantes se usan sobre superficies y no sobre mucosas y piel, ya que pueden dañarlas. Sirven para prevenir las infecciones.
Los antisépticos, por otro lado, actúan sobre la piel, ya que atacan las sepsis o degeneramiento de los tejidos heridos o dañados, previniendo la infección de estos.
El poder de estos productos depende de la concentración del agente y del tiempo de actuación. Asimismo, al aumentar la temperatura aumenta la acción desinfectante.
Hasta la próxima.
Vida Sana & Hogar Limpio